Innovación y creatividad, los partners perfectos

Innovación y creatividad son dos términos que deberían ir de la mano.

Al final, la publicidad que no nos sorprende suele ser poco efectiva. Y para sorprender inevitablemente hay que innovar en algo. Ofrecer algo diferente.

Cuando una campaña innova en su forma de plantear el mensaje, o incorpora algún avance tecnológico o un nuevo formato, suele tener una mejor aceptación por parte de los consumidores y también un mejor recuerdo.

Tendemos a asociar la innovación siempre a la tecnología, pero creo que es un error, ya que la innovación puede significar simplemente enfocar las cosas desde otro punto de vista diferente. Atreverse a pisar nuevos territorios en marketing y comunicación ya es, en sí mismo, innovar.

Los productos y las marcas están siempre a la búsqueda de innovación. Ya sea incorporando un nuevo material a un calzado, a través de un nuevo packaging que ofrece una nueva ventaja al usuario, una nueva funcionalidad tecnológica en un teléfono, o incluso una pastilla Tri-camara de detergente.

Pero si nos fijamos, cuando comunicamos todas estas “novedades”, siempre solemos recurrir a algún valor emocional que nos explique qué nos aporta dicha innovación, para qué nos vale y qué significa para nosotros.

Si es un nuevo material deportivo que nos aporta mayor impulso para correr, significa para nosotros que somos mejores deportistas, nos superaremos y conseguiremos nuestras metas. Si nuestro móvil hace mejores fotos con su nueva cámara, significa que podemos sacarle más partido a nuestra creatividad. Y si nuestro detergente es más efectivo, significa que nuestra ropa estará impecable y siempre estaremos de estreno con nuestra camisa favorita.

Es por eso que, si nos limitáramos solo a plantear la innovación sin creatividad, sería todo muy aburrido. ¿Para qué voy a necesitar cambiar la cámara de mi móvil si no es para sacar al artista que llevo dentro?

En definitiva, innovación y emoción si van de la mano son mucho más fuertes.

Recuerdo mi primer día de clase, cuando estudiaba publicidad. Uno de mis profesores entró en el aula y sin dar los buenos días, ni presentarse, dejó su maletín en la mesa, miró al frente, respiró profundamente y dijo en voz alta: “Medio, soporte, forma y extensión”. Y lo repitió tres veces seguidas.

Hablaba del formato y del contenido. Y para destacar la importancia de estos dos aspectos tan esenciales en comunicación, el mismo INNOVÓ en la forma de decirlo. Y consiguió que, a día de hoy, aún recuerde sus palabras. Eso es innovar.

Daniel Ferrer, creative director beon. Creativity