La sociedad cada vez está más digitalizada. Vivimos rodeados de un mundo virtual cada vez más tecnológico en el que sólo vale sorprender con algo nuevo. La inteligencia artificial está evolucionando rápidamente, llegando a extremos que serían inimaginables hace años. Cómo muestra de este avance están los modelos e influencers digitales. Personajes que no existen en la realidad, pero que son seguidos por millones de personas en sus redes sociales. Aunque ellos no existan físicamente, los productos que muestran existen en la vida real y puedes hacerte con ellos.
Las campañas de marketing más exitosas cuentan con influencers con voz humana, real y auténtica, creando una conexión emocional con sus seguidores. Pero este nuevo embajador de marca ya no camina por las calles, asiste a eventos o colabora con importantes marcas. La reciente llegada de estos personajes creados con inteligencia artificial da un giro a todos los esquemas hasta ahora planteados. Personajes que ganan importantes cantidades de dinero gracias a firmas que les pagan por promocionar y dar publicidad a sus productos a través de las redes sociales.
A los influencers digitales sólo les falta ser de carne y hueso. Han sido creados y diseñados por estudios y firmas como proyectos de arte digital o marketing, generando tanta expectación como followers, en contrapartida con sus competidores reales. Estos nuevos embajadores virtuales están revolucionando las redes sociales y también sectores como la moda o lifestyle. Debido a su alto número de seguidores, grandes marcas buscan en ellos promocionar sus productos. Muchos de ellos no están diseñados inicialmente para este trabajo, pero por su extrema popularidad ya han atraído a diversas compañías que buscan acuerdos de colaboración.
Es muy importante crear una conexión única a través de la autenticidad y el compromiso, ¿puede la inteligencia artificial crear una conexión real con sus seguidores? Este es un tema muy poderoso para la marca. El influencer debe conocer bien a sus usuarios, lo que les gusta o lo que no, etc. Las tecnologías sensoriales tienen un papel importante en este ámbito y podrán generar un gran impacto.
La primera influencer virtual tiene nombre y apellido: Lil Miquela (@lilmiquela). Grandes marcas han trabajado con ella como estrategia de comunicación de sus marcas. Detrás de estos personajes virtuales existe un equipo de especialistas en robótica, inteligencia artificial y marketing. Sus apariencias renderizadas no han supuesto ningún inconveniente para ganar nuevos followers y tener engagement.
