El mar, un espacio privilegiado para los eventos de incentivos

Jaime Sánchez, COO de nuestra agencia beon. Worldwide, nos explica por qué el mar tiene cada vez más protagonismo en los viajes de incentivo.

¿Crees que el mar en general es inspirador para este tipo de eventos?

El mar puede ser un espacio más donde desarrollar eventos de incentivos, con la peculiar limitación de que se deben acotar a determinadas temporadas del año: desde mediados de primavera a mediados de otoño, salvo en Canarias lógicamente. Aunque lo cierto es que muchos eventos náuticos pueden disfrutarse todo el año con un traje de neopreno.

Las actividades que se pueden desarrollar en el mar van relacionadas con el buen tiempo y la diversión, de ahí que se puedan organizar desde acciones más lúdicas hasta de carácter más competitivo.  Por ello, el mar inspira a crear multitud de incentivos de diversas índoles y con objetivos diferenciados.

 ¿Qué ventajas o cosas positivas ofrece el mar para este tipo de eventos?

Sobre todo, el significado que conlleva para los asistentes el desplazarse a un entorno exterior donde el mar es protagonista, o a una zona de costa. Estos enclaves transmiten relajación, diversión, liberación de estrés, calma, ocio… Los asistentes son receptivos a este tipo de espacios, por lo que cualquier actividad que realices será bienvenida.  

De esta manera, el entorno también lleva a la relajación de las formas, del vestuario, e incluso de la decoración, ya que el espacio no necesita mucha más ornamentación que el propio paisaje.

Es uno de los espacios preferidos por los asistentes internacionales que tienen nuestro país como un referente de sol y playa.

¿Qué tiene de negativo? 

A nivel de producción todos los montajes que tengan que realizarse en una playa requieren de estructuras especiales que permitan una firme sujeción. Además, las playas difícilmente cuentan con accesos eléctricos, por lo que, si hemos de montar un equipo de sonido, luces y demás equipamiento que requiera energía habrá que subcontratar un generador que permita poner en funcionamiento todos estos elementos.

Aunque el tiempo es un factor que afecta a cualquier evento que se realice al aire libre, también deberíamos tenerlo en cuenta. Sí que haría especial atención al tema de la seguridad como el delimitar zonas de baños, contar con socorristas o vigilantes de seguridad, etc.

Luego está el tema de la petición de permisos a las entidades públicas para cualquier actividad que se vaya a realizar en el mar o sus cercanías, siempre hay que solicitarlos con bastante antelación. En muchas ocasiones ‘costas’ no permite realizar ciertas actividades en la playa o mar.